L.A. Cetto Reserva Privada Nebbiolo
2015
Valle de Guadalupe, Baja California, México
El fin de semana pasado tuve la oportunidad de dirigir un par de catas con alumnos de gastronomía del Instituto Fleming de Saltillo. Aunque tengo diez años ininterrumpidos como profesor universitario (de Derecho), esta era la primera vez que me paraba frente alumnos pero para hablar de un tema muy diferente: el vino. Fue una experiencia muy interesante, que disfrute enormemente y que espero haya sido de provecho para esos futuros chefs.
Pues bien, en esa cata uno de los vinos que seleccioné fue el que protagoniza esta entrada: L.A. Cetto Reserva Privada Nebbiolo. La casa productora, L.A. Cetto, es una de las vitivinícolas más grandes de México, con más de 80 años de experiencia en la producción de vinos en el Valle de Guadalupe.
Me pareció apropiado que probáramos este vino porque es uno de los vinos mexicanos más consumidos en restaurantes, además de que representa muy dignamente a nuestra mayor región de producción de vino (el Valle de Guadalupe) y a la uva que posiblemente esté dando mejores resultados en el Valle: Nebbiolo.
La Nebbiolo es una uva de origen italiano. En este país ha dado renombre principalmente a las regiones de Barolo y Barbaresco con vinos extraordinarios. Es una uva que suele producir vinos con alta acidez y tanicidad.
A pesar de las evidentes diferencias climáticas con el noroeste de Italia, en el Valle de Guadalupe está uva se ha adaptado en forma espléndida, produciendo vinos de gran calidad. Posiblemente sea la Nebbiolo la uva que termine posicionándose en los próximos años como la referente del Valle de Guadalupe.
A pesar de las evidentes diferencias climáticas con el noroeste de Italia, en el Valle de Guadalupe está uva se ha adaptado en forma espléndida, produciendo vinos de gran calidad. Posiblemente sea la Nebbiolo la uva que termine posicionándose en los próximos años como la referente del Valle de Guadalupe.
Antes de compartirles la ficha de cata debo confesar que este fue un feliz reencuentro con este vino. Lo había probado hace algún tiempo, por curiosidad pues había escuchado a muchas personas referirlo como una muy buena opción. En aquella ocasión que lo probé lo bebimos inmediatamente después de descorchar y aunque no me pareció un mal vino, me parecieron exagerados los comentarios que había escuchado. Sin embargo, en esta ocasión ha sido una experiencia completamente distinta. El haberlo dejado respirar fue la clave. Es un vino que conforme se oxigena evoluciona muy favorablemente y va desprendiendo lo mejor de sí. Pero bueno, aquí les comparto las notas de cata 👇
👀 A la vista es un vino color rojo granate profundo, con ribete rojo y con ligeros destellos rosados y violáceos. La capa de color es media alta, es un vino brillante y que presenta muy buena limpidez. El lagrimeo es consistente, en general la capa cae en forma uniforme, pero también se forman algunas lágrimas gruesas que cae lentamente.
FASE
VISUAL
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Blanco
Color
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Ribete
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Rojo granate profundo
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Rojo con destellos rosados
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Capa
de color
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Brillo
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Limpidez
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Lagrimeo/Viscocidad
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Media alta
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Brillante
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Muy buena
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Consistente
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👃 En nariz tiene un ataque intenso y profundo con una intensidad media a media alta. La complejidad y concentración del vino también fluctúan entre medios y medios altos. Se percibe con muy buena limpidez y mejora con la segunda impresión. De hecho, es un vino al favorece enormemente dejarlo respirar. En la propia contra etiqueta se recomienda abrirlo una hora antes de servirse. Da notas profundas a frutos rojos como la cereza y negros como la mora y la ciruela. También se encuentra muy presente una nota animal a cuero, una ligeramente herbal como a eucalipto y otra terrosa, a tierra seca.
FASE
AROMÁTICA
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1ª
Impresión
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Fuerza/Intensidad
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Carácter
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Complejidad
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Muy buena
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Media alta
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Frutos rojos y negros, especies, nota
animal, herbal
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Media a media alta
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Concentración
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Limpidez
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2ª
Impresión
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Media a media alta
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Muy buena
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Mejor
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👄👅 En boca tiene un ataque suave y ligeramente cálido. La acidez se percibe media a media alta, así como la tanicidad y el cuerpo, tratándose de un vino con cierta carnosidad. El alcohol se percibe en un nivel medio y los taninos son persistentes. En boca se confirman las notas frutales a frutos rojos, aunque predominan más los negros. Se aprecia especiado, como a pimienta negra, pero también con un ligero toque de vainilla y caramelo, la nota a cuero también está presente, así como en forma ligera la típica sensación salina de los vinos del Valle de Guadalupe. Deja un retrogusto agradable, con un elegante toque ahumado y una sensación ligeramente terrosa en boca.
FASE
GUSTATIVA
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Ataque
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Dulzor/Sequedad
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Acidez
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Alcohol
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Tanicidad
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Cuerpo
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Permanencia
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Suave y ligeramente cálido
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Seco
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Media a media alta
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Medio
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Media a media alta
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Medio a medio alto
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Media
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Carácter
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Frutos rojos y negros, cuero, especies
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En suma, se trata de un gran vino con una de las mejores relaciones calidad/precio que podemos encontrar en vinos mexicanos. Se puede tomar sólo, pero es de esos vinos que inmediatamente invita a acompañarlo con alimentos. Para el maridaje tiene una gran versatilidad, pues sus notas frutales y acidez le vienen muy bien a platillos italianos a base de tomate (pastas, pizzas, etc.), pero las notas especiadas y animales hacen que maride también muy bien con cortes de carne tradicionales, pero también con carnes con una mayor intensidad de sabor como, por ejemplo, la de venado. Que lo disfruten. Salud 🍷
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